¿Qué tienen en común Diana Palazón, Peret y la silueta de una mujer desconocida? Pues simplemente que han aparecido los tres juntos en mi sueño de esta noche. ¿Y porqué lo cuento? Por que me apetece. Claro que sólo recuerdo detalles del sueño. Por ejemplo, que la mujer desconocida era otra actriz española (ya sabéis que en los sueños sabemos cosas que en realidad no conocemos. Por ejemplo, yo en mis sueños soy capaz de hablar inglés, alemán, e incluso algún idioma que no existe y con el que todo el mundo me entiende).
Otra cosa que recuerdo es que íbamos a Portugal a un concierto de un grupo, pero no sé qué grupo era. Peret iba en su furgoneta, tuneada a lo hippy; y Diana, la otra actriz y yo, íbamos en coche, tras él. Por supuesto, yo no conducía.
Recuerdo que hicimos noche en una carretera que, a la vez, era césped. Asfalto verde. Pero lo mejor es que, cuando nos despertamos por la mañana (por supuesto, dormimos en el coche), Peret ya estaba despierto, había desayunado y tocaba la guitarra. A mí me tocó ir a por el desayuno. Tres cafés a algún bar. La actriz española que no era Diana Palazón me dio tres aceitunas para que los pagara. Yo, en mi sueño, pensé: «¿Tres aceitunas? Vale. Supongo que tendré suficiente. Aquí en Portugal todo es más barato»… Y de camino al bar, sonó el despertador…
Conclusión: tengo debilidad por Diana Palazón, por su sonrisa y su cara. Pero eso ya lo sabía. Lo demás… otro de mis sueños.